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Isaías, IS, 37:37, Então Senaqueribe, rei da Assíria, levantou acampamento, foi embora, voltou para Nínive e por lá ficou.

Por Isaías, Antigo Testamento

Na guerra, garotos não devem bancar os heróis.

Por A Batalha Esquecida (filme)

Atos, AT, 19:5, Eles, tendo ouvido isto, foram batizados no nome do Senhor Jesus.

Por Atos, Novo Testamento

Jó, JÓ, 3:20, ´Por que se concede luz ao miserável e vida aos de coração amargurado,

Por Jó, Antigo Testamento

LA LLUVIA La lluvia tiene un vago secreto de ternura, algo de soñolencia resignada y amable, una música humilde se despierta con ella que hace vibrar el alma dormida del paisaje. Es un besar azul que recibe la Tierra, el mito primitivo que vuelve a realizarse. El contacto ya frío de cielo y tierra viejos con una mansedumbre de atardecer constante. Es la aurora del fruto. La que nos trae las flores y nos unge de espíritu santo de los mares. La que derrama vida sobre las sementeras y en el alma tristeza de lo que no se sabe. La nostalgia terrible de una vida perdida, el fatal sentimiento de haber nacido tarde, o la ilusión inquieta de un mañana imposible con la inquietud cercana del color de la carne. El amor se despierta en el gris de su ritmo, nuestro cielo interior tiene un triunfo de sangre, pero nuestro optimismo se convierte en tristeza al contemplar las gotas muertas en los cristales. Y son las gotas: ojos de infinito que miran al infinito blanco que les sirvió de madre. Cada gota de lluvia tiembla en el cristal turbio y le dejan divinas heridas de diamante. Son poetas del agua que han visto y que meditan lo que la muchedumbre de los ríos no sabe. ¡Oh lluvia silenciosa, sin tormentas ni vientos, lluvia mansa y serena de esquila y luz suave, lluvia buena y pacifica que eres la verdadera, la que llorosa y triste sobre las cosas caes! ¡Oh lluvia franciscana que llevas a tus gotas almas de fuentes claras y humildes manantiales! Cuando sobre los campos desciendes lentamente las rosas de mi pecho con tus sonidos abres. El canto primitivo que dices al silencio y la historia sonora que cuentas al ramaje los comenta llorando mi corazón desierto en un negro y profundo pentagrama sin clave. Mi alma tiene tristeza de la lluvia serena, tristeza resignada de cosa irrealizable, tengo en el horizonte un lucero encendido y el corazón me impide que corra a contemplarte. ¡Oh lluvia silenciosa que los árboles aman y eres sobre el piano dulzura emocionante; das al alma las mismas nieblas y resonancias que pones en el alma dormida del paisaje!

Por Federico García Lorca

II Samuel, 2SM, 14:4, A mulher tecoíta apresentou-se ao rei, e, inclinando-se, prostrou-se com o rosto em terra e disse: - Ajude-me, ó rei!

Por II Samuel, Antigo Testamento

Mateus, MT, 15:5, <J>Vocês, porém, dizem que, se alguém disser ao seu pai ou à sua mãe: ´A ajuda que você poderia receber de mim é oferta ao Senhor`,</J>

Por Mateus, Novo Testamento

Ester, ET, 9:31, para confirmar estes dias de Purim nos seus tempos determinados, como o judeu Mordecai e a rainha Ester lhes haviam ordenado, e como eles mesmos já o tinham estabelecido sobre si e sobre a sua descendência, a respeito do jejum e do seu lamento.

Por Ester, Antigo Testamento

⁠Eu sempre acreditei que inevitavelmente chegará o tempo em que uma mulher será julgada pelos mesmos padrões morais utilizados para os homens, pois não é a sua específica virtude feminina que lhe dá um lugar de honra na sociedade humana, mas o valor da missão cumprida por ela, o valor de sua personalidade como ser humano, como membro da sociedade, como pensadora, como lutadora.

Por Alexandra Kollontai

A economia é extremamente útil como forma de emprego para os economistas.

Por John Galbraith