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Um grama de exemplos vale mais que uma tonelada de conselhos.

Por Provérbio popular

Josué, JS, 23:10, Um só de vocês perseguirá mil, pois o Senhor, seu Deus, é quem luta por vocês, como ele prometeu.

Por Josué, Antigo Testamento

Infeliz é aquele a quem as lembranças da infância trazem apenas medo e tristeza.

Por H.P. Lovecraft

Há duas coisas que a experiência deve ensinar: a primeira é que se torna indispensável corrigir muito; a segunda é que se não deve corrigir de mais.

Por Eugène Delacroix

... presos num conto de fadas apenas a dois encontraremos o caminho presos num gobelino que nós dois tecemos juntos isolados de todos com uma língua que apenas você e eu entendemos.

Por Jostein Gaarder

A mentira é triste, eu sei, mas preferia estar com ela agora.

Por Gabriela Freitas

A loucura é diagnosticada pelos sãos, que não se submetem a diagnóstico. Há um limite em que a razão deixa de ser razão, e a loucura ainda é razoável. Somos lúcidos na medida em que perdemos a riqueza da imaginação.

Por Carlos Drummond de Andrade

CÓMO SABER ESCUCHAR Las palabras más comúnmente usadas significan cosas distintas para personas distintas. A la mayor parte de nosotros nos preocupa casi siempre exponer nuestros propios puntos de vista, y tendemos a considerar lo que dicen otras personas como una tediosa interrupción del flujo de nuestras proprias ideas. Ideas cuya mayor parte son creencias sin experiencia. Lo que creemos no es descubierto por una serie de actos en la realidad, sino que nos es inculcado desde la infancia por nuestros padres, la escuela, la presión socio-comercial-religioso-política. Ayer conversé con una persona que me pareció completamente ajena a lo que yo le estaba comunicando. Tuve ganas de decirle: "Digo lo que digo, pero lo que tú escuchas no es lo que digo sino lo que tú crees que estoy diciendo. Olvídate de tus creencias, vacía tu mente, abre tu corazón y entonces escucharás lo que te dicen." Vaciar la mente? ¿Cómo? Cada uno de nosotros posee no solamente un yo, sino un auto-concepto. Todos suprimimos, hasta cierto punto, aquella información con la que no nos gusta enfrentarnos, ya sea sobre nosotros mismos o sobre cualquier otro asunto. El auto-concepto incluye solamente lo que somos capaces de decirnos a nosotros sobre nosotros mismos. De la misma manera que el mapa no es el territorio, el auto-concepto, de igual modo, nunca incluye todo el yo. Como el propósito básico de nuestra actividad vital es la protección, manteniemiento y perfeccionamiento de nuestro auto-concepto, teniendo gran prisa en llegar a ser más de lo que somos, defendiendo nuestras particularidades, no nos damos tiempo de escuchar a los otros. Pêro sí nos damos tiempo de enfurecernos y atacar a todo lo que se nos presenta como ajeno. Esta actitud no nos permite desarrollarnos plenamente. Vivimos enquistados en nuestra personalidad infantil, encerrados en un mundo limitado, tal un pollo que no quiere romper la cáscara del huevo que lo contiene. Ese huevo está formado por la sociedad estacionaria, aquella que rechaza todo cambio esencial. Una persona plenamente desarrollada está en y es de la sociedad de la que es miembro, pero no es prisionera de dicha sociedad. Sabe ver el autismo de los otros pero también puede reconocer y admirar cualquier valor que tengan los otros. "Dado que pocos son verdaderamente sinceros con ellos mismos, es indudable que pueden existir en ellos pensamientos, sentimiento, deseos y necesidades que no han tenido ocasión de sentir. Si cambiara su actitud de defender tercamente sus auto-definiciones podrían despertarsus valores sublimes." Cambiando nuestra mirada interior podemos liberarnos de esos problemas debidos a la carencia de conocimiento de nosotros mismos. Y el conocimiento de nosotros mismos es necesario y anterior a todas las demas clases de conocimiento. ¿Cuando decimos "nosotros mismos" debemos comprender que estamos separados de los otros, cual una isla? De ninguna manera. Somos una infima parte de una unidad eterna e infinita. Más que individuos somos una humanidad. Y más que eso: somos una unidad cósmica. No vivimos en un país, en un planeta, sino en un gigantesco, inmenso, misterioso, tremendo universo. Conocerse a si mismo es conocer el mundo infinito y eterno que está en nosotros. Oir a los otros es oirnos. Amar a los otros es amarnos. Dar a los otros es darnos. Para saber escuchar es necesario saber hacer reinar el silencio en nuestro interior. El cerebro jace resonar en su materia, sin cesar, palabras que lo ensordecen. El corazón no piensa, late y esos latidos se unen a los latidos de todos los otros corazones. Escuchar al otro es acompañar cariñosamente al auténtico yo del otro, sin aprobar o desaprobar su auto-concepto.

Por Alejandro Jodorowsky

Sentou-se para descansar e em breve fazia de conta que ela era uma mulher azul porque o crepúsculo mais tarde talvez fosse azul, faz de conta que fiava com fios de ouro as sensações, faz de conta que a infância era hoje e prateada de brinquedos, faz de conta que uma veia não se abrira e faz de conta que que dela não estava em silêncio alvíssimo escorrendo sangue escarlate, e que ela não estivesse pálida de morte mas isso fazia de conta que estava mesmo de verdade, precisava no meio do faz de conta falar a verdade de pedra opaca para que contrastasse com o faz de conta verde-cintilante, faz de conta que amava e era amada, faz de conta que não precisava morrer de saudade, faz de conta que estava deitada na palma transparente da mão de Deus, (...) faz de conta que vivia e não que estivesse morrendo pois viver afinal não passava de se aproximar cada vez mais da morte, faz de conta que ela não ficava de braços caídos de perplexidade quando os fios de ouro que fiava se embaraçavam e ela não sabia desfazer o fino fio frio, faz de conta que ela era sábia bastante para desfazer os nós de corda de marinheiro que lhe atavam os pulsos, faz de conta que tinha um cesto de pérolas só para olhar a cor da lua pois ela era lunar, faz de conta que ela fechasse os olhos e seres amados surgissem quando abrisse os olhos úmidos de gratidão, faz de conta que tudo o que tinha não era faz de conta, faz de conta que se descontraía o peito e uma luz douradíssima e leve a guiava por uma floresta de açudes mudos e de tranquilas mortalidades, faz de conta que ela não era lunar, faz de conta que ela não estava chorando por dentro (...)

Por Clarice Lispector

Ele escreve. O seu desejo é o desejo de tornar habitável o deserto.

Por António Ramos Rosa